miércoles, 12 de enero de 2011

Carta abierta al Miércoles

Miércoles: 

Disculpame que te increpe tan de sobresalto, y de esta manera un tanto oprobiosa. Pero te lo tengo que decir. Qué día mediocre que sos. El problema es muy simple: con vos nunca se puede estar segura, porque al final ves todo gris, no sos ni muy muy, ni tan tan, y al final resultaste un tibio. Obstáculo inevitable como peaje de autopista hacia el fin de semana. No te pareces al solemne Lunes, ni al despreocupado Viernes; mucho menos a ese fiacún del Domingo. Ellos se posicionan ante el calendario y en la agenda dejan asentada su personalidad, nos guste o no. En cambio vos terminas pivotando entre Martes y Jueves, par de picarones, y te amoldas a la rutina que mas te convenga según sople el viento. No es tu culpa tampoco esta condición estructural que te ha impuesto el gregoriano, sin consultarte siquiera. Pero esta actitud de ni fu ni fa va a terminar mal, y siempre termina pagando el que queda en el medio, acordate...

No hay comentarios:

Publicar un comentario